miércoles, 14 de junio de 2006

Película 85 # Año 3


Batalla en el Cielo
14 y 15 de Junio
Sala Avenida - Jaraíz
21:30 Horas



DIRECTOR

Carlos Reygadas

GUIÓN: Carlos Reygadas

MÚSICA: John Tavener

FOTOGRAFÍA: Diego Martínez Vignatti  

REPARTO:  Marcos Hernández, Anapola Mushkadiz, Berta Ruiz, David Bornstein, Rosalinda Ramírez 

GÉNERO: Drama | Erótico. Crimen. Secuestros / Desapariciones

PAÍS: México     DURACIÓN: 88 Min.





SINOPSIS 

Violenta historia de culpa, sexo y poder. Marcos, un chofer mestizo que trabaja para un general, secuestra con la ayuda de su mujer a un sobrino del militar, pero, desgraciadamente, el bebé muere de forma accidental. Marcos, más frágil de lo que creía, empieza a derrumbarse y acaba confesando lo que ha hecho a Ana, la hija de su jefe, una chica que se prostituye por placer. Ana y la mujer de Marcos intentan, cada una por su lado, ayudarlo, pero es inútil, ya es demasiado tarde. Marcos se hunde en el abismo y arrastra con él a Ana durante un extraño peregrinaje a la basílica de Guadalupe.


¿Quién es quién?


Carlos Reygadas (Ciudad de México, 1971) es un director de cine mexicano.

En 2000, Reygadas fundó su productora NoDream Cinema, reunió a un equipo de debutantes en largometraje y filmó su ópera prima, Japón. La película fue financiada por el Hubert Bals Fund y presentada en el Festival Internacional de Cine de Rótterdam en 2002. Ahí mismo fue invitada a la Quincena de Realizadores del Festival de Cannes, donde recibió una Mención Especial de la Cámara de Oro.

Batalla en el cielo fue su segundo largometraje. Se trata de una coproducción mexicana-francobelga con Mantarraya Producciones, The Coproduction Office y NoDream Cinema. Se estrenó en la Selección Oficial en Competencia en el Festival de Cannes de 2005 y recibió el Premio del Jurado en el Festival de Lima del mismo año.

Su estilo autoral no intenta agradar al gran público, y a fe que lo consigue. No hay espectador convencional que se le resista.


Tal como éramos






Y me parece a mi

Que no gane Luzbel

Controvertida película del director mexicano, que tenía 35 años cuando levantó una polvorosa escandalera. Ha sido su obra más vilipendiada a la par que la más vista. Utilizando actores no profesionales se ampara en una historia, con muchos saltos de guión, sobre un secuestro fallido para hablarnos de Ciudad de México, una infernal población donde cualquier cosa es posible con tal de sobrevivir.

Al margen de consideraciones cinematográficas, que siempre serán subjetivas, "Batalla en el cielo" es una experiencia inolvidable. Para unos porque se sumaron a las desbandadas que abandonaban las salas, rasgándose las vestiduras; para otros porque se divirtieron mucho viendo el cabreo del personal y consideraron que muy mala no podía ser cuando provocaba actitudes tan drásticas; los hubo que disfrutaron con algo tan diferente a lo que estaban acostumbrados; y quienes elucubraron durante meses con las supuestas intencionalidades de Reygadas....

Lo que no cabe duda es que en el contar del autor pesa dolorosamente el viacrucis de su patria: la corrupción, el ejército, la Iglesia, las desigualdades, los malos hábitos, las búsquedas desesperadas.... Demasiadas cosas que acentúan la inestabilidad de una sociedad, que está más próxima de la locura colectiva, que de alguna solución imaginativa.

Tal vez el realizador busque paralelismos entre las catástrofes bíblicas y la situación de gravedad extrema de esa urbe ingobernable de peligrosos tentáculos:
"En ese momento empezó una batalla en el Cielo: Miguel y sus Angeles combatieron contra el Monstruo. El Monstruo se defendía apoyado por sus ángeles, pero no pudieron resistir, y ya no hubo lugar para ellos en el Cielo. Echaron, pues, al enorme Monstruo, a la Serpiente antigua, al Diablo o Satanás, como lo llaman, al seductor del mundo entero, lo echaron a la tierra y a sus ángeles con él". Apocalipsis (12, 7-10)

Si en la lucha que nos ocupa, la de Marcos y Ana, muere el ángel bueno nadie alcanzará la salvación.

Jaht


Estaba pasando

  • Centenares de personas despiden a Rocío Jurado en La Almudena
El deán de la Catedral madrileña oficia el funeral por la muerte de la cantante chipionera

  • Rajoy asegura que su 'no' al Estatuto catalán es un "sí a la libertad" y al "sentido común"
El líder del PP insiste en Barcelona en la inconstitucionalidad del texto 

  • Bush dice que quiere cerrar Guantánamo pero que necesita decidir qué hacer con los presos

miércoles, 7 de junio de 2006

Película 84 # Año 3

 Nadie sabe

(Dare mo shiranai)

Miércoles 7-Jueves 8 / Junio-2006

Sala Avenida-Jaraíz

21:30 Horas

 


DIRECTOR

Hirokazu Koreeda
 
GUIÓN: Hirokazu Koreeda
 
MÚSICA: Gontiti
 
FOTOGRAFÍA: Yutaka Yamasaki
 
REPARTO:  Yûya Yagira, Ayu Kitaura, Hiei Kimura, Momoko Shimizu, Hanae Kan, Susumu Terajima 
 
GÉNERO: Drama | Infancia. Familia. Drama social. Basado en hechos reales   
 
DURACIÓN: 141 Min.
 
PAÍS: Japón 
 


SINOPSIS

Cuatro niños, hijos de distinto padre, viven felices con su madre en un pisito de Tokio, aunque nunca han ido al colegio. Un buen día, la madre desaparece dejando algo de dinero y una nota en la que encarga al hijo mayor que se ocupe de sus hermanos. Condenados a una dura vida que nadie conoce, se verán obligados a organizar su pequeño mundo según unas reglas que les permitan sobrevivir. Sin embargo, el contacto con el mundo exterior hace que se derrumbe 
 el frágil equilibrio que habían alcanzado.
 

Y me parece a mi

Ni quiere saber

Cuanto más "avanzada" consideramos a una sociedad, más fosilizados tiene sus sentimientos. El progreso de los países punteros no está basado en el bienestar común sino en el confort individual. Japón es ejemplo de muchas cosas a nivel tecnológico o industrial pero me temo que está pagando un alto precio en esta imparable mutación de humano a humanoide. Muchos les admiran por sus conquistas materialistas, e incluso les consideran gente de orden. No creo que sean un referente interesante, al menos para mi. La sangre que corre por sus venas se está enfriando y, más temprano que tarde, será difícil distinguirles de los robots que están sustituyendo a los trabajadores en todas las facetas de esa insípida vida en que se han embarcado y que, como máquinas inteligentes, también saben reír y achinar los ojos.

Kore-eda sabe muy bien que esta pérdida de valores, el último en apagarse debería ser el amor maternal, acabarán en una glaciación espiritual sin precedentes.

Algunos colegas en esto del critiqueo fílmico consideran que, aunque basado en un hecho cierto, la historia está exagerada. Con todos los respetos, lo que está inflamada es su creencia de que la bondad sigue siendo una imbatible cualidad humana. Como grupo humano hace mucho tiempo que tomamos el corto atajo del egoísmo, tirando por la borda, en nuestro avance, todo lo que sobra: viejos, enfermos, niños...; todo aquello que nos estorbe en nuestro objetivo inmediato: el beneficio económico y la escalada profesional. Por eso en este "sálvese quien pueda" dejamos en las garras de los fondos de inversión y sus primos hermanos, los buitres, el cuidado de los más desvalidos e inocentes. En el caso de Keiko ni siquiera eso. Hay quien considera que es menos inhumano, aún, echarlos a la taza del váter y tirar de la cadena.
Jaht





Tal como éramos