sábado, 11 de febrero de 2023

Película 640 # Año XX

  Filmoteca de Extremadura
Programación de cine itinerante por  núcleos rurales extremeños en colaboración con CineClub "El Gallinero"

 

Utama

 Miércoles 15 de Febrero/2023

Sala Avenida/Jaraíz

20:30 Horas


 
DIRECTOR

Alejandro Loayza Grisi

GUION: Alejandro Loayza Grisi

MÚSICA: Cergio Prudencio

FOTOGRAFÍA: Barbara Alvarez

REPARTO: Luisa Quispe, José Calcina, Santos Choque

GÉNERO:  Drama | Vejez / Madurez 

DURACIÓN: 87 Min.

PAÍS: Bolivia
 


SINOPSIS

En el altiplano boliviano, una pareja de ancianos quechuas lleva años viviendo la misma vida cotidiana. Durante una sequía inusualmente larga, Virginio y su esposa Sisa se enfrentan a un dilema: resistir o ser derrotados por el entorno y el propio tiempo.

 

 ¿Quién es quién?

 

Alejandro Loayza Grisi (1985). Es un cineasta boliviano. Su ópera prima “Utama” se estrenó en el Festival de Sundance 2022 donde obtuvo el Gran Premio del Jurado. Ganó además 3 premios en Cine en Construcción en Toulouse 2021, incluido el Grand Prix.

Alejandro inicia su carrera artística en la fotografía fija, realizando muestras, numerosas publicaciones y ganando 2 premios nacionales en Bolivia. Posteriormente salta a la imagen en movimiento como director de fotografía, donde destaca su trabajo en la serie documental Planeta Bolivia, el video álbum Ningún Vals y los cortometrajes Polvo, Dochera y Aicha.

 Atraído por las historias que se pueden contar con la creación de imágenes, incursiona en guion y dirección de cine campo en el que hoy se desempeña.

 

El cine boliviano.  Y mira por dónde, más de veinte años después de nuestros inicios, aparece por El Gallinero la primera producción boliviana. 

Bolivia, país con doble extensión que España y apenas doce millones de habitantes, ubicado entre Brasil, Argentina, Chile, Perú y Paraguay es un Estado multiétnico, porque en su territorio coexisten varias naciones cuyos orígenes son anteriores a la colonización española. Además del español, 36 lenguas indígenas tienen estatus oficial,  de las cuales las más habladas son quechua, aimara y guaraní. 

Su cine, aunque se manifestaron los primeros indicios para la élite, en los últimos años del siglo XIX ha padecido de raquitismo secular.  Las primeras filmaciones cinematográficas se realizan a partir de la segunda década del siglo XX; y tienen más que ver con documentos fílmicos históricos, folklóricos o de arqueología cultural. En 1948, la empresa Emelco rueda Al pie del Illimani en conmemoración al IV Centenario de fundación de La Paz, largometraje documental que consiste en la sucesión de varios cortos dedicados a aquella celebración y se considera como el primer largometraje sonoro boliviano.


 En 1953 Jorge Ruiz rodó Vuelve Sebastiana, cortometraje premiado en el Festival de SODRE en Montevideo, Uruguay, convirtiéndose en el primer film boliviano en obtener un galardón internacional.

En 1965 Sanjinés aborda el tema minero en Aysa. El mismo Jorge Sanjinés (integrante del Grupo Ukamau) que, en 1989, ganó la Concha de Oro de San Sebastián con La nación clandestina y años después rodó junto a Geraldine Chaplin, Para recibir el canto de los pájaros

Otros directores dignos de mención son: Paolo Aggazzi, de origen italiano: Mi socio, Abriendo brecha... ; o, Marcos Loayza con Cuestión de fe. Los problemas para los creadores en Bolivia, además del presupuesto, tuvieron siempre que ver con problemas de censura, en función de los gobernantes de turno.

Casualmente, la atención al cine se redobla con la llegada de Evo Morales, cuya revolución indígena, bajo el nombre de Cocalero llevó al celuloide un conocido nuestro, el colombiano Alejandro Landes (Porfirio, Monos), bajo bandera del país del altiplano.

 Tonchy Antezana, Juan Carlos Valdivia, Tomás Bascopé, Germán Monje, Rodrigo Bellot, Saulo Chinchero, Yashira Jordán, Violeta Ayala, Juan Carlos Soto... son algunos de los nuevos realizadores. Y,  Cementerio de Elefantes, El ascensor, Hospital Obrero, Cruces, La última jugada, Los Viejos, Caminos Celestiales, Durazno, The Bolivian Case... , alguna de sus obras.

Y me parece a mi

El cóndor suicida

Supongo que, como yo, habréis hecho el ejercicio de buscar el significado de Utama, término quechua que viene a traducirse como "nuestro hogar". En este caso el lugar en el que Virginio y Sisa han vivido y en el que desean morir. Pero cuando se alteran los ritmos de la Naturaleza y la mano del hombre, calificado dudosamente como inteligente, provoca cambios indeseados que actúan directamente, y con una rapidez inusitada sobre aspectos fundamentales como el clima; el desequilibrio hace que deje de llover donde antes lo hacía, que se inunden zonas antes habitadas, que el sol queme donde antes acariciaba y que desaparezca la vida de culturas que aguantaron placenteramente el paso de los siglos.

Estos dos viejitos solo quieren cerrar el ciclo normal de su existencia, sin más alteraciones que las propias del cambio de estado que tiene lugar cuando llega el momento de partir: pasar de carne a polvo, seguir unidos a la tierra. Ellos no se creen más importantes que los cóndores o las llamas que pastorean. Ellos necesitan muy poco para vivir, pero es imposible hacerlo sin agua en el altiplano andino. ¿Alguien de nuestro "civilizado" mundo piensa en ellos cuando derrocha energías fósiles, envenena los océanos o se dedica a agujerear la capa de ozono?

Necesitan, y es de justicia, que hablen por ellos, que son gentes de mucho mirar y poca queja. Por eso Alejandro Loayza Grisi ha filmado este documento que nos ha tocado profundamente; también escueto en las palabras, pero aportando unas imágenes más que esclarecedoras, que paran el tiempo y nos dejan ver aquellas cosas que la estupidez, las tecnológicas prisas y el alarmante eclipse que envuelve el sentido común, nos habían hurtado.

Bonita y emotiva.
Jaht
 

 


1 comentario:

  1. Utama está despojada de cualquier artificio. Es la sencillez, el ejemplo de que somos naturaleza y a ella hemos de volver, por más que en las ciudades nos escondamos tras el ridículo escudo del control y la inmortalidad.

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