viernes, 16 de febrero de 2018

"La Verata Fowl" (Reseña científica)


“La Verata Fowl”. 

Según se desprende de un estudio publicado recientemente por la famosa revista científica “Veterinary Science News”, en la Comarca de la Vera (Cáceres) ha sido descubierta una nueva raza de gallina dotada de la capacidad de articular en su canto voces de contenido cinematográfico. El sorprendente trabajo, que ha sido dirigido por el eminente catedrático Donat Aterido Sinfreu, en colaboración con prestigiosos especialistas de la Universidad Autónoma de Barcelona, ha posibilitado confirmar la existencia de esta subespecie de aves de corral que han conseguido desarrollar una inédita adaptación que les permite disertar sobre cine con cierta coherencia.

La investigación dio comienzo hace algunos años a partir de testimonios, a los que en principio se dio poca credibilidad, y que pusieron al experto tras la pista de este tipo de ponedoras. El profesor Aterido emprendió entonces una decidida cruzada con el propósito de intentar localizar y rescatar a la hoy conocida como “gallina verata”.

En su artículo afirma que: “Todo comenzó hace quince años mientras realizaba mis Estudios de Doctorado en Inglaterra, fue entonces cuando escuché como algunos estudiantes Erasmus extremeños, entre pinta y pinta de cerveza, relataban el extraño caso”. Fascinado por la historia, este académico de la Facultad de Agro-economía e Ingeniería Forestal, comenzó un largo peregrinaje que le llevo a recorrer la ladera meridional de la Sierra de Gredos en el intento de localizar alguno de esos ejemplares que, entre otras características destacables, poseen la capacidad de “cantar” argumentos propios de un crítico de cine. Tras una exhaustiva búsqueda descubrió que en un remoto lugar de la geografía extremeña existía un grupo de pollos y gallinas que, utilizando ingeniosas estrategias, escapaban de los corrales para acudir semanalmente a las sesiones de un olvidado cineclub. Allí, en sesiones regulares de poco más de hora y media, eran estimulados con las imágenes que se sucedían en pantalla. “Al calor de las butacas, estos pájaros se criaban bien a la vez que han ido adquiriendo un porte, envergadura, colorido y modalidad de cloqueo característicos que les hace dignos de exposición”. Declara también que, con mucho esfuerzo ha logrado reunir algunas de estas aves. Actualmente dispone de un “plantel de recuperación” de unas 40 aves, a las que mima en una parcela anexa a su despacho universitario.

Asevera en su artículo que gracias a esa búsqueda, a los trabajos de campo realizados en colaboración con otros estudiosos y a un minucioso seguimiento de las aves, nos encontramos hoy ante un ave muy apreciada cuyo valor comienza a ser reconocido internacionalmente: “Hasta hace bien poco su existencia era completamente desconocida, pero ahora, los escasos ejemplares existentes en el mercado alcanzan cifras astronómicas”.

La Verata Fowl, como ha empezado a ser denominada, está en primera línea de las noticias científicas. En agosto se publicó un report en “Veterinary Science News” en el que revela que estas gallinas son capaces de cacarear cine durante horas. “En un principio se trataba de toscos balbuceos, pero hemos podido constatar como, a fecha de hoy, articulan con total claridad voces como “Bong Joon-ho”, “Wes Anderson” o “Naomi Kawase”, seguidas de listados de películas y resúmenes de sus argumentos".

En un proyecto de cuatro años, para el cual se han tomado muestras de sangre a más de treinta ejemplares, un equipo de la Universidad de Nothingam, junto a investigadores extremeños, catalanes, franceses, coreanos y australianos, tratará de identificar el origen de esta alteración, que al parecer se remonta a unos tres lustros atrás. El análisis previo del ADN de algunos ejemplares parece haber determinado que la mutación es debida a la cinefilia de los bichos y se halla localizada en un inofensivo retrovirus alojado desde hace unos 15 años en su genoma. Este desencadenó la acumulación de un pigmento biliar llamado biliverdina del celuloide en el cerebro de los animales lo que desató su destreza parladora.

El profesor Aterido Sinfreu explica: “Hemos podido determinar que el material genético de gallos y gallinas ha comenzado a ser transferido a unos pocos individuos, todavía inmaduros, lo que nos hace concebir esperanzas sobre el futuro de la raza”. Un estudio comparativo ha permitido determinar que la Verata Fowl es diferente de otras gallinas atípicas como la conocida dongxiang china, capaz de poner huevos azules o la Laying del Putumayo, caracterizada por desarrollar escamas en los orificios auditivos. Según consta en el citado informe científico, el parentesco entre estas tres variedades ha quedado descartado. Los nuevos datos aportados por el estudio han determinado también que esta volátil no se encuentra relacionada con los primeros huesos de gallina pertenecientes al Pleistoceno Tardío hallados en el paraje “Los Hornillos” de Jaraíz de la Vera en 1994. 

Sello de calidad
Que esta gallina sea reconocida a nivel regional, nacional e internacional es una de las metas del estudio que está llevando a cabo el equipo investigador desde sus inicios, si bien posteriormente han surgido nuevos desafíos. En su trabajo, el especialista se sincera para reconocer que "Aún quedan ciertos puntos oscuros por aclarar: En nuestras pruebas de laboratorio hemos observado que al ser interpeladas con nombres como Fritz Lang,  Akira Kurosawa o Robret Bresson se quedan como bloqueadas, cruzan los ojos y caen al suelo turulatas. Con el fin de completar nuestro estudio, tenemos previsto poner en marcha un seminario de trabajo que nos permita aclarar está conducta”.   
En 2017, coincidiendo con la proyección número 400 del CineClub se reunieron en Jaraíz de la Vera especialistas e interesados en la raza con el propósito de reivindicar el sello que garantice la calidad de sus huevos. Ha quedado constatado que se trata de unos huevos inusualmente grandes debido a la calidad de vida y alimentación de las aves: retozando al sol y el aire libre, chapoteando por las gargantas, correteando de un lado para otro, comiendo pasto, gusanitos e insectos y acudiendo a las proyecciones que el citado CineClub programa una vez por semana.


 El profesor Aterido Sinfreu ha aportado más de cuarenta muestras de sangre para la investigación.

Reseña Bibliográfica recogida por Ave César

3 comentarios:

  1. Joaquín Juevero18/2/18, 15:20

    Espero, y confío, que los estudios del profesor Sinfreu demuestren de forma categórica que la Verata Fowl, si bien es buena ponedora, no da bien en la cazuela. Sé, de buena tinta que hay grandes aficionados al deguste de gallinas con desviaciones cinematográficas. Sin ir más lejos, en el actual gobierno de la nación, con su presidente al frente, hay grandes devoradores de volátiles que insinuen que "en cierta ocasión vieron una película" De hecho hay quien afirma que la famosa y concluyente prueba: "Fritz-Akira-Bresson" fue practicada a un gallego, de nombre Mariano, que desde entonces cacarea incongruencias y amaga extrañas gesticulaciones, que están relanzando toda la industria humorística, eso sí, con unos efectos secundarios letales para sus gobernados, sean aves, borregos o merluzas.

    Si conseguimos la denominación de origen se hará realidad aquel canto, fruto de la sabiduría popular, que decía lo de: "Tres cosas hay en la Vera, envidia del mundo entero: el Pimentón, la Serrana y el cine de El Gallinero"

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  2. Carlos Pérez18/2/18, 15:34

    Pues ahora que usted lo mienta, estimado Joaquín; creo recordar que se habló en aquella histórica convención del año 2017, de las sospechosas preguntas de algunos invitados sobre el buen ver de los muslitos de algunos integrantes de nuestro corral y de sus posibilidades culinarias, cuestiones que pusieron sobre aviso a los pavos más desconfiados.
    Cuidémonos y mantengámonos alerta, que a veces la ciencia transmuta en enemiga.

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  3. La Avefría18/2/18, 21:40

    Estoy de acuerdo con Carlos.
    Hay que andarse con cuidado con cierto tipo de “investigaciones”.
    Me quedo con las aves mestizas, por la sencilla razón de que ha sido la naturaleza y sus mezclas quien ha determinado sus condiciones. Los seres híbridos cuentan con una carga genética propia de la selección natural que los hace, biológicamente, más adaptados al medio, verdaderos supervivientes. Tanto ellos como sus ancestros han sido muchas veces excluidos por carecer de pureza racial, han tenido que luchar en condiciones adversas y disputar con otros alimento y territorio, condicionantes que les sitúa en posición privilegiada en la escala de la selección natural. Están mejor adaptados en contextos poco favorables, son más saludables, fuertes y libres. Su diversidad genética les hace más longevos.
    El catálogo de avefrías cuenta con 24 especies, además de algunas subfamilias que permanecen confusas, una rica variedad que nos hace diferentes y autónomas.
    Existe un punto esencial e indiscutible, los mestizos somos únicos, estamos dotados de diverso plumaje, variadas costumbres, voces distintas, arrojo y características peculiares. Los catalogados “de raza” son idénticos entre sí, calcos unos de otros, algo que los hace aburridos y en extremo cargantes.
    Si se nos uniforma tal vez seríamos capaces de sostener asambleas ordenadas y metódicas. Prefiero el “gallimatias” al aburrimiento, el empalago y la falta de inventiva.
    En fin, por otro lado, la defensa de las razas puras ha dado lugar a nefastas experiencias históricas.
    Creo, sin embargo, que puedo dormir tranquila, los proyectos de investigación en este país permanecen varados por falta de fondos. Por lo que sé el mentado gallego, en cuanto a investigación científica se refiere, se encuentra en un dilatado episodio de tacañería que no le permite “aflojar la mosca”.

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